Es cierto que un buen rociado puede ayudar a tus plantas a mitigar el calor, pero hay algunas que no lo toleran. Ficus elástica, diefenbaquia, costilla de Adán, bromeliáceas y palmeras lo agradecerán seguro. Pero no lo harán las especies de hoja vellosa, como violeta africana, gloxinia o ginura, que se estropearán si se humedecen, ni tampoco las de flores delicadas, ni las crasas o semicrasas como sanseviera, portulaca o pandanus. Busca otros sistemas para refrescar el ambiente, como situarlas sobre una bandeja llena de agua y gravilla o pequeños cantos rodados, o instalar cerca un humidificador.